Con este blog quiero completar la obra que inicié con "Contemplando el claro azul", que continuó con "Me acordé de ti" y "Recordé cuánto te gusta". Quiero con él comenzar el 2014 esperando que sea fructífero y que podáis disfrutar conmigo estos versos. Y ya vamos por el 2020.

sábado, 21 de enero de 2017

21º. Construyendo el paisaje.


En pie.
Junto al ancho cauce.
Mirando la cumbre.
Un plan.

Andando.
Junto a la orilla.
Subiendo en el valle.
Un camino.

Sentado.
Junto al hilo de agua
que de la piedra nace.
Una esperanza.

Tumbado.
Con los ojos cerrados.
Sintiendo la tierra
y el límpido aire.
Una vida.

De pie.
Mirando hacia el cielo.
Trazando el camino
que recorre un sueño 
inalcanzable.
Una tarea.

Escalando.
Con el cuerpo encajado
entre las grietas.
Un anclaje.

Enganchado.
Agarrado al cordón
que se desliza
 por la afilada sierra.
Una cadena.

Empujado.
Agitado por la corriente 
del viento enojado.
El desconcierto.

Esfuerzo.
Coraje.
Descanso.

Acostado.
Adherido a un estrecho saliente
del muro desgastado.
Otro descanso.
Contemplando la cima.
Un punto lejano.

Escuchando.
El ruidoso trueno
de una inmensa cascada
que hiere en el fondo,
porque al caer socava.
Una herida.

Esfuerzo.
Coraje.
Descanso.

Subiendo.
Clavijas de acero.
Gravedad de cuerdas lanzadas.
Flechas que señalan
el Pico del Alma.
La llegada.

Distinta mirada en la base.
Distinta en la subida.
Distinta en el fin de la etapa.
Dibujando la calma.
Construyendo el paisaje.