Con este blog quiero completar la obra que inicié con "Contemplando el claro azul", que continuó con "Me acordé de ti" y "Recordé cuánto te gusta". Quiero con él comenzar el 2014 esperando que sea fructífero y que podáis disfrutar conmigo estos versos. Y ya vamos por el 2020.

domingo, 27 de octubre de 2019

32º. Más encuentros y reencuentros.


"Traces urbaines" de Alain Geiberger en la Mairie de Vaison-la-Romaine. Agosto 2019.

En julio escribí "Encuentros y reencuentros" tras la experiencia familiar en Elche de la Sierra. Me gustaría que comenzárais la lectura con aquellos versos publicados, porque a imagen y semejanza he escrito en estos meses este "Más encuentros y reencuentros" tras los días de agosto vividos con otra familia que aún no es de sangre porque falta hacer el ritual (por favor, no se haga, la sangre me marea; es prescindible). En este enlace "Encuentros y reencuentros" y a continuación "Más..."



Luz.
Color.
Velocidad.
Puentes.
Obstáculos
encadenados
para no alcanzar
el destino.

Calma. Sierra. Insomnio.
Condiciones no suficientes
para ocultarnos.

Piedra. Mercado. Bandera
al viento.
Defensa
de roca
ya sin almenas,
sin peligros,
sin alertas.
Vendajes 
para la herida
que cada una
encierra.

Suelos.
Medias paredes.
Medias columnas.
Medio puente.
Media muralla.
Cultura sin frontera
en una terminal
dibujada 
para la música
de las máquinas
y el sonido del talento.

Confesiones.
Emociones.
Rasgos indefinidos
e incompletos
que van creando
un espacio
para los afectos.
Lazos para un futuro
que ir construyendo.

Más música en los dedos.
Un sueño sin cuerdas,
al viento
de encuentros y reencuentros.

Bosque. Río.
Puentes que son cuerdas.
Lavanda. Insectos.
Picaduras del alma
que no cesan.
Puentes que son roca.
Rocas que son arte,
respetadas
en las entrañas
de la tierra;
vistas con los ojos
de la tecnología.
Y a unos pasos,
arte profanado
por la economía
de la empresa.
Almas ultrajadas
por la actividad
que deja de ser rescate
para convertirse en barrera.

Frío. Calor.
Al final del trayecto
símbolos al aire
agarrados a las ventanas
y a las barandas asfixiantes.
Desencuentros.
Y lo más importante:
roca sobre roca
que hacen historia:
alma sobre alma
que son victoria:

Sueños.
Lazos.
Encuentros.
Reencuentros.
Confesiones.
Emociones.
Música al viento.